miércoles, 7 de febrero de 2007

Colo Colo no tiene techo

Editorial de la revista Fox Sports publicado en diciembre de 2006.
Por PABLO ARO GERALDES

Hay dos caminos para hacerse seguidor de un equipo de fútbol. El primero y más popular es el de vivir la pasión de los colores. Allí no habrá virtudes técnicas ni aciertos tácticos que incrementen el cariño, el sentimiento será incondicional. Pero, más allá de los amores y las nacionalidades, también se puede disfrutar de un equipo “ajeno” que despliegue una vocación ofensiva en cualquier cancha y que busque el protagonismo apostando al talento de sus jugadores.
En este selecto lote se paró el Colo Colo. Si la máxima del fútbol es acercarse a “las 3 G”, gustar, ganar y golear, el equipo conducido por Claudio Borghi lo está consiguiendo.

Su fórmula es sencilla: salir a ganar siempre, algo no muy común entre los equipos chilenos. Mientras el país se posicionaba bien arriba entre los de América Latina, el fútbol marchaba en otra dirección. El deporte rey no acompañó el crecimiento y los años de crisis económica mostraron su marca negativa en los torneos internacionales. Colo Colo y el fútbol chileno perdieron protagonismo. Tanto los clubes como la Selección cedieron posiciones ante equipos que hace dos décadas estaban cómodos en los últimos lugares.

Por eso, este presente del albo puede ser una señal de despegue, la marca de un camino. En la cancha, la audacia; afuera, la profesionalización. En este sentido, la alianza con Boca Juniors puede representar otro acierto en áreas como el fútbol menor y el profesional, las políticas y prácticas comerciales, y el manejo del estadio Monumental. Para el presidente de Blanco y Negro, Cristián Varela, se trata de “una relación de largo aliento entre los clubes más populares y ganadores” a ambos lados de Los Andes. Tal vez el gerenciamiento marque una tendencia en el fútbol nacional. Sebastián Piñera subió la apuesta: “Nos propusimos hacer de Colo Colo una potencia dentro y fuera de la cancha. Aspiramos a ganar el Clausura y la Sudamericana.
Lo mejor de Colo Colo está por venir”.

A los Bichi Boys no les pesa el favoritismo. Son, por lejos, el mejor equipo de la Copa Nissan Sudamericana. En su arrollador camino a las semifinales, despedazaron a Saprissa y a Gimnasia y Esgrima La Plata. Tienen a un talento desequilibrante como el de Matías Fernández y la avalancha goleadora de Humberto Suazo. A ellos les suman nombres de ascendente nivel como Arturo Sanhueza, Rodrigo Meléndez, Arturo Vidal y la promesa grande de Alexis Sánchez.

Se discutirá mil veces cuál es el fútbol que le gusta a la gente, pero la producción del Colo Colo 2006 gana admiradores a lo largo de América. Desde 1991 que Chile no ponía en la cancha a un equipo de semejante nivel competitivo. Los chicos juegan, en el amplio sentido de la palabra. Tocan de primera, gambetean, abren la cancha y buscan el arco rival sin complejos. Borghi fue uno de los extranjeros más talentosos que pisó el fútbol chileno: el equipo que conduce le hace honor a su trayectoria.

1 comentario:

La Nadie dijo...

Mira que interesante Don Pablo, por primera vez estoy en desacuerdo contigo. Porque, porque el colo-colo puede brillar mucho, pero sencillamente le llega un equipo que le sepa abrir la cancha y lo mata, y eso pasó en la final de la Nissan, el Pachuca, con un viejo zorro en esto de abrir canchas como Meza (digo zorro porque lo viví con mi equipo, Atlético Nacional, en su instancia -"Sachi" Escobar- hacia lo mismo, jugar 3-5-2, en la libertadores, la liga de "ojitos", nos empacó 4 allá, y nos ganó acá) le ganó al los "caciquez", y lo gritó a los 4 vientos, pero nadie lo escuchó: SOLAMENTE ES ABRIRLE LA CANCHA, hoy, en la libertadores, nadie le ha aplicado eso, a excepción del primer partido que le veo trabajado a Passarella, dejando a un lado su retórico 4-4-2, para pasarlo a una técnica abierta...
El colo-colo es un gran equipo, nadie lo niega, pero con saberle jugar, basta!.

Saludos, y muy respetable tú opinión...